Ayer, murieron los ángeles…
Donde nadie sabe dónde,
donde mi fracaso se esconde;
allá murieron los más infieles.
Se marchitaron las plumas,
al seseo del viento;
pudrieron flores su aliento,
destartalándose las brumas.
Adiós, ángeles de pelo oscuro;
rotos, débiles, delicados.
De sueños alborotados.
Adiós, ángeles, adiós.
gbc
Pintura: recitales